Vivir sin permiso. ★★★☆☆
2 temporadas. 23 episodios. (2018 - 2020)
Telecinco. Netflix.
Nemo Bandeira es un narcotraficante gallego que controla absolutamente todo en el pueblo de Oeste. Cuando le diagnostican Alzheimer, comienza toda una carrera por su sucesión en su familia, en sus negocios legales y también en los ilegales.
José Coronado es Nemesio Bandeira (Nemo para los amigos), respaldado por su fiel escudero y guardaespaldas Ferro (Luis Zahera). Álex González interpreta a Mario Mendoza, el oscuro ahijado de Nemo que es su abogado a la vez que un ambicioso candidato a heredar todo el poder de la familia Bandeira. Pilar Castro y Unax Ugalde son otras caras conocidas que encontramos en esta historia.
El éxito de títulos como Narcos o Fariña influye claramente en esta producción que repite la historia de un todopoderoso benefactor de la comunidad que esconde un pasado y un presente delictivo del cual surge realmente su fortuna. La trama resulta al principio atractiva en tanto en cuanto introduce el factor de la enfermedad que deteriora la memoria del protagonista y los primeros capítulos enganchan bastante porque además tienen acción y ritmo, pero la historia va tomando caminos demasiado complejos y se pierde en giros de guión tan poco creíbles como innecesarios de manera que va perdiendo fuelle a medida que avanza. José Coronado hace un buen papel, sin ser de sus mejores interpretaciones, pero quien destaca por encima de todos es Luis Zahera con un personaje duro a la vez que divertido y finalmente entrañable por la forma en que se desvive por su jefe y amigo tanto en los negocios como en los avatares a los que le lleva su enfermedad. El contrapunto negativo lo pone Àlex Monner en la piel de Carlos Bandeira, hijo de Nemo, con una interpretación sobreactuada e insufrible que caricaturiza al personaje y destruye la escena cada vez que aparece.
Temporada 2 (2020). 10 episodios (Actualización). ★☆☆☆☆
Temporada nefasta que sobra claramente. Se fuerza la entrada de una serie de personajes mafiosos mejicanos que pretenden tomar el control de Oeste y que destrozan la trama original hasta límites insospechados. Reaparecen personajes como los de Álex González y Unax Ugalde de formas poco creíbles y la historia no tiene ni pies ni cabeza.
Para mi, Vivir sin permiso ha sido esa serie que te gusta al principio pero con la que finalmente tienes que hacer un esfuerzo para acabarla y no abandonarla antes de tiempo.